Mujer de otoño
Pilar Clau
“Mujer de otoño” es la prueba de que también pasan cosas buenas.
Es un conglomerado de emociones que solicitan atención. Es juego, es pensamiento, naturaleza y tiempo. Empezó como un juego de emociones y rimas, y acabó reconciliándome con la vida.
Es un lugar de encuentro donde yo y yo conversamos, recordamos, buscamos, nos comprendemos, nos perdonamos y nos amamos. Un lugar desde donde observamos lo mejor de ti y del mundo.
“Mujer de otoño” es un propósito, un pacto de futuro conmigo misma y con la tierra sellado con versos.
Voy a vivir despacio, suavemente,
una existencia dulce y deleitosa.
Y por sendas hostiles
avanzaré tranquila,
audaz, cautivadora,
sin procurar atajos,
solo fluir
risueña y confiada.
Yo que siempre he vivido a borbollones,
con apremio, con furia,
con avidez, desvelos y fatigas,
voy a mirar más lejos,
más allá del miedo y de la pena,
de las contradicciones y del caos.
Más allá:
donde abunda la vida,
y dejaré que sea,
que sea la vida.
Voy a vivir despacio, suavemente.
Foto: Juan Moro
Pilar Clau estudió Filología Hispánica en la Universidad de Zaragoza. Ha desarrollado su trayectoria profesional como periodista. Es columnista en Heraldo de Aragón y profesora de Comunicación corporativa y protocolo en el CEU en Protocolo, Ceremonial y Organización de Eventos de la Universidad de Zaragoza. Ha publicado dos novelas, Pétalos de luna (Booket, Planeta, 2016, y Tagus, Planeta, 2013) y La sobrina (Booket, Planeta, 2018). Escribió con Mariano Gistaín Lo mejor de Zaragoza (2009), Agua y cielo (2010), Zaragoza, tú y yo (2011), Dulces piedras escondidas (2011) y Generación Row (2012)