Preludio y fado

Nos encontramos ante un nuevo libro de Joaquín Sánchez Vallés, sin duda alguna, uno de los poetas de más honda vocación y de más clásica formación de cuantos podemos encontrar por estos lares y, me atrevería a proclamar, de cuantos han hecho de nuestra lengua su vehículo de expresión.

No creo descubrir nada al decir que, junto a Ángel Guinda y José Luis Trisán, Joaquín forma la tríada más sólida de la poesía aragonesa de esa generación indefinida y maldita...

Es el libro más pesimista de su autor. Se palpa un presentimiento trágico, a pesar de la contenida expresión de la mayor parte de sus poemas.

Antonio Pérez Lasheras